Chile, se destaca una vez más en tener las cifras más altas de prevalecías de obesidad y sobrepeso en el mundo. Ya se habla de cifras cercanas al 60%, de malnutrición por exceso.
Lejos están los problemas de déficit de peso, y lo que preocupa cada vez más, es la malnutrición por exceso, todo lo contrario. Cambios demográficos, socio económicos, de patrones de alimentación y de estilos de vida, explican el aumento de la obesidad infantil en Chile. ¡Tristemente campeones mundiales!
La obesidad, es la epidemia de este siglo. Se define como, el exceso de peso, a expensas de la masa grasa. Lo que pone en riesgo, a los niños. La obesidad es considerada por la OMS una enfermedad crónica, porque se perpetua en el tiempo y ya que se asocia a trastornos metabólicos como es el hipercolesterolemia y la resistencia a insulina, lo que determina mayor riesgo de diabetes mellitus, hipertensión, aterosclerosis y finalmente muerte prematura.
Un peso aislado, no puede constituir un diagnóstico de obesidad o sobrepeso, el que se hará siempre considerando la talla, y la cantidad de grasa magra y grasa involucrada.
En niños menores de 6 años, las tablas Nchs, que relacionan el peso, la edad y la talla, es lo que define obesidad, se habla de obesidad cuando un niño, supera en un 20% su peso ideal, para su edad y talla. Para los niños sobre los 6 años, o aquellos que iniciaron su desarrollo puberal se considera el IMC (índice de masa corporal), que se obtiene dividiendo el peso por la talla (en metros) al cuadrado, cuya normalidad llegan hasta el percentil 85, sobre el percentil 90 se considera obesidad. Entre los 10 y 16 años debe asociarse a la clasificación de tanner, que es el desarrollo de caracteres sexuales.
La medición del perámetro de cintura, permite la evaluación de acumulación de grasa abdominal, que se asocia a un mayor riesgo cardiovascular y metabólico.
Es un error considerar que el estirón puberal, cambiará la condición nutricional, debe darse importancia antes que sea mas tarde. Debemos actuar y cambiar los factores de riesgo modificables, que son: aumento de la ingesta calórica y la disminución de actividad física. Sobre todo en este tiempo pandémico que nos enclaustra en las casas, disminuyendo al mínimo el movimiento.
Así como Botero (El genial escultor y pintor colombiano), cada día más, estamos viendo más y más obesos, que antes no sospechábamos que podían existir. El problema es que ahora no solo es en dibujo o imaginación, sino en una triste realidad. Debo agregar que un 35% de las madres de niños obesos, considera que su hijo tiene un peso normal.
Recuerde que la responsabilidad no es de su hijo, sino de usted. Acuda a control médico con su hijo, para prevenir o tratar esta enfermedad.